José M. Cúetara Vila. Foto: Cortesía del Museo Provincial Palacio de Junco |
Integrante desde sus inicios, en 1968, del Movimiento de Activistas de Historia del Comité Provincial del Partido, Colacho –como afectuosamente le conocíamos–, llegó a encabezar el naciente Equipo de Historiadores del Deporte en Matanzas.
Significativos fueron sus aportes sobre los orígenes del juego de pelota en la Atenas de Cuba y fiel defensor de la trascendencia de los míticos terrenos del Palmar de Junco, para merecer la sede del Salón de la Fama y el Museo del Béisbol en Cuba, por la cual abogó hasta su postrer aliento.
Ganador de premios y menciones diversos en los certámenes nacionales de Historiadores y Corresponsales Deportivos, a Colacho le debemos la publicación en múltiples ediciones de Girón y el suplemento Yumurí, de novedosos artículos sobre el movimiento deportivo en la provincia.
De obligada consulta para especialistas en la materia es el folleto de su autoría, intitulado Matanzas. Notas Históricas y el deporte de la pelota, editado en 1973 por la Comisión Provincial de Activistas de Historia del Comité Provincial del Partido.
Entre otros muchos méritos, al inolvidable historiador cardenense se le reconoce haber sido uno de los promotores del Campeonato de Béisbol Manolo García in Memoriam y de la creación del terreno de béisbol del Yumurí, en la barriada versallera, junto con el también desaparecido promotor deportivo José Manuel Dávalos.
Militante del Partido y fundador asimismo como tenor, del Teatro Lírico de Matanzas, al fallecer Cuétara Vila ostentaba por cuatro años consecutivos el Reconocimiento Cerro Pelado.
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