Por Reynaldo González Villalonga
En la Serie Nacional de Béisbol de 1968–69, durante un juego efectuado en el estadio Latinoamericano, el matancero Rigoberto Rosique, jardinero central del equipo Henequeneros, realizó una jugada insólita.
Con tres hombres en bases del club Centrales, Rosique fildeó a cordón de zapato una línea bateada por Eulogio Osorio.
Al tirar a la intermedia, logra 2 outs. Entonces el camarero tira a la inicial y coge movido al corredor, para sellar tres outs.
Pero resulta que el inicialista tira a tercera base y sorprende al hombre que había salido con el batazo en ese inning. Se consumaba así un inusual cuádruple play sin asistencia. Créalo o no.
No hay comentarios.:
Publicar un comentario